Filadelfia crea un desvío y sapos pueden cruzar

En la ciudad de Filadelfia, siempre hay una etapa del año en que miles de sapos bebes cruzan por medio de saltos atravesó de la carretera, pero el problema es que muchos mueren año con año pues la carretera es muy transitada.

Los pequeños sapos pasan el camino para lograr llegar a los bosques del otro lado, donde comerán mosquitos y crecerán para convertirse en sapos americanos de tamaño normal (Bufo americanus). Después de un par de años, ya como adultos, volverán a hacer el viaje pero en sentido inverso, a menos que sean aplastados por un automóvil.

Esto ahora cambiará, pues se ha creado un desvió en dicha carretera que evitara que los pequeños sapos estén en peligro.

El Centro Schuylkill para la Educación Ambiental instala cada año un retén en el barrio de Roxborough, a fin de desviar los automóviles y permitir que los anfibios puedan cruzar la calle de dos carriles sanos y salvos.

Las noches de esta temporada, existen tantos sapitos en movimiento que parecería que el lodoso margen de la carretera estuviera vivo. Varios voluntarios los recogen en vasos de plástico y los depositan del otro lado.

"No esperaba en absoluto que hubiese tantos", dijo Kaitlyn Hunt, de 17 años, mientras sostenía un vaso con más de una decena de sapitos. "Y son tan pequeños. Parecen bichos".